2/7/08

Un árbol en el centro del pueblo


La importancia del árbol de la plaza va más allá de lo estético o de lo sentimental y entra en el terreno de lo simbólico. Su importancia puede quedar reflejada en las siguientes líneas extraídas de un texto de Jean Hani El simbolismo del templo cristiano:
…”el templo primitivo y natural, antes de que el hombre conociera el arte de construir, fue sencillamente el mundo; el mundo es la morada de la Divinidad, pues está escrito: “Llenos están el cielo y la tierra de tu gloria” (Isaías, cap.63). Pero como el mundo es demasiado vasto para ser aprehendido eficazmente en un acto ritual, el hombre redujo el universo a un paisaje familiar y representativo. El esquema general y natural del templo es el paisaje elemental constituido por la colina (o el tumulus) con su gruta, las piedras, el árbol y el manantial. Todo ello circunscrito y protegido por un recinto que anuncia el carácter sagrado del lugar.”
O de Mircea Eliade en su libro Imágenes y símbolos:
…”La variante más extendida del simbolismo del Centro es el Árbol Cósmico que se halla en medio del Universo y que sostiene como un eje los tres mundos.”
Estos árboles aislados, aparecen en emblemas, como centro de una plaza, asociados a una iglesia o ermita, como soporte de una aparición milagrosa, como lugar de reunión y encuentro para decisiones de importancia, también para la diversión, o como elemento que une, a través del tiempo, a generaciones de vecinos.
Su importancia no puede pasar desapercibida sólo por estar siempre ahí y formar parte de lo cotidiano…durante siglos.
Como decíamos antes, cuando se sustituye la olma hay que pensar en uno que dé la talla, que sea de largo vivir. Que sea digno representante de un pueblo, dentro o fuera de un escudo. Resistente a buenos y malos tiempos, sobrio y de sombra acogedora.

No hay comentarios: